El Moisés de Miguel Ángel y sus particularidades

El Moisés de Miguel Ángel y sus particularidades

El Moisés de Miguel Ángel y sus particularidades

 

Por Rubén Omar Scollo

 

Entre las creaciones de una época plagada de puro arte, sobresale entre otras, el Moisés como una obra maestra del Renacimiento y de la historia del arte en general.
Según figura en ciertos relatos, el adelantado Miguel Ángel, mientras realizaba los últimos acabados, se sintió tan sorprendido por el realismo de la escultura, que la golpeó en la rodilla con el martillo, mientras exclamaba: “¿Por qué no hablas?”.

Y ese  Moisés bíblico, representado a través de esa gran escultura, es el perteneciente al libro del Éxodo. La obra retrata el momento en que desciende del monte Sinaí con la tabla de los diez mandamientos y se encuentra con los despojados israelitas adorando a un becerro de oro.

Esta creación representa un majestuoso Moisés sentado, con las Tablas de la Ley bajo un brazo, mientras con la otra mano acaricia su larga barba.
Una de las características que llama la atención en esta escultura son los dos cuernos que salen de la cabeza. Los investigadores y expertos creen  que la representación de algunos personajes de la Biblia era común. “Esto era debido a la traducción errónea de una palabra hebrea”. Según muchos críticos, ésta fue una de las obras favoritas de Miguel Ángel.
Moisés fue elaborada en la etapa más madura en el arte de Miguel Ángel y la pregunta era…¿Por qué tiene dos cuernos?
A finales del siglo IV San Jerónimo de Estridón, padre y doctor de la Iglesia, hizo un monumental trabajo traduciendo la Biblia desde el griego y el hebreo, al latín.Cuando San Jerónimo tradujo Éxodo 34, 35 se encontró con una palabra compuesta por las letras KRN. (Es importante aclarar que en hebreo no se escriben las vocales.) La cual se puede interpretar como “keren” (radiante, luminoso, con rayos de luz) o “karan” (cuerno).
Actualmente la mayoría de las Biblias traducen aquel pasaje de la siguiente manera:
“Y los Hijos de Israel vieron entonces que rayos de Luz emanaban de la tez del rostro de Moisés”.
San Jerónimo, en cambio, optó por la siguiente traducción:“Y los Hijos de Israel vieron entonces que cuernos emanaban de la tez del rostro de Moisés”.
Esta escultura está localizada en la Basílica de San Pietro in Vincoli, también llamada San Pedro ad vincula, en Roma, Italia. Además, se encuentran a tan solo unos siete minutos a pie desde el Coliseo.
Desde 1545 en el lado derecho del transepto de la iglesia se puede admirar una de las obras maestras del arte del siglo XVI, el Moisés de Miguel Ángel.