La arqueología subacuática en nuestro país
La arqueología subacuática en nuestro país

La arqueología subacuática en nuestro país

Resultados de la arqueología submarina en Argentina

Por R.O.S

Nuestro país, si bien cuenta con notables profesionales e investigadores en el área de la arqueología submarina, no posee tantas riquezas hundidas, como ocurre con otras regiones de Latinoamérica y de otras partes del mundo. Lo cierto es que está asociada a los hechos históricos de trascendencia. Y si se vincula el pasado con todo lo sucedido a través del tiempo, tanto en Europa, Asia o inclusive en Asia y África, el registro arqueológico submarino es sobradamente más amplio y repleto de riquezas en piezas rescatadas de las aguas.

La arqueología subacuática en Argentina tiene sus particularidades como ocurre en casi todo nuestro continente americano, más precisamente en las regiones insulares, El mismo abarca  primeras etapas, dentro de las cuales se inscriben tanto los primeros descubrimientos como las investigaciones más sistemáticas con miras a la protección del patrimonio cultural subacuático. Una zona rica es la que tiene la propia Patagonia, siendo Puerto Madryn y otros sitios cercanos, los poseedores de barcos hundidos.

Aunque los primeros hallazgos de embarcaciones fueron realizados durante las décadas finales del siglo XIX, en la costa del Río de la Plata por encima de la línea de mareas y siguiendo el trazado de diques del actual Puerto Madero. Uno de ellos corresponde a los restos de un casco de madera, descubierto en 1887 en las excavaciones de la Dársena Sur del Puerto de Buenos Aires.

 El otro, también parte de un casco de  madera, fue encontrado durante los trabajos de construcción del Dique 3 del puerto en 1890. En ambos casos se encontraron asociados a cañones, proyectiles de cañón, utensilios y restos de arcabuces, entre otros objetos, aunque no se realizó ninguna clase de relevamiento de los mismos.

 En 1933, durante los trabajos de dragado en el exterior de la Dársena Norte del puerto, se encontraron los restos atribuidos a una de las naves más emblemáticas de la Nación, barco insignia del Almirante Guillermo Brown: la fragata “25 de Mayo”, hundida junto al bergantín mercante Florida en 1827 en las cercanías del barrio de Retiro .Gran parte de los restos recuperados (cañones, parte de la quilla, el codaste y el timón, anclas y anclotes) se encuentran en el Museo Naval de la Nación (MNN), mientras que otras piezas metálicas se hallan en el Complejo Museográfico ‘Enrique Udaondo’. Se han realizado muy pocas intervenciones en esta zona por parte de profesionales en arqueología subacuática. No obstante, algunos restos de piezas y estructuras rescatadas en esta primera etapa fueron estudiadas durante las última décadas.Los restos de la “25 de Mayo” que se exhiben en el MNN fueron estudiados dentro de un proyecto de rescate de riquezas. (FUENTE INFORMATIVA Revista de Arqueología Americana)