Talleres lo dió todo en Brasil

Talleres lo dió todo en Brasil

Este martes por la noche no era un día cualquier para el Matador, y era debido a que Talleres visitaba a Flamengo en el mítico estadio Maracaná de Río de Janeiro para jugar la segunda fecha del Grupo H de la Libertadores. Ambos equipos llegaban de ganar en sus respectivos debuts en la competencia: Talleres que superó la semana pasada a Universidad Católica 1-0 en el Kempes y el equipo carioca que se impuso como visitante ante Sporting Cristal de Perú 2-0.

Terminó siendo un 3-1 a favor del equipo brasileño donde el descuento albiazul fue obra de Fertoli, y de esta forma, la “T” se quedó con los tres puntos que había conseguido en el debut. Entonces ahora deberá recuperarse del golpe para conseguir un buen resultado en la tercera fecha, que le tocará recibir a Sporting Cristal el martes 26 de abril, a las 21:30hs.

En el partido, la “T” había arrancado bien, intentando generar situaciones de riesgo y sin meterse atrás, es más, el equipo de Caixinha intentaba ir para adelante queriendo jugarlo en el área del equipo brasileño. Pero a los 8’ el árbitro no dudó en cobrar penal a favor del local y Gabriel Barbosa lo cambió por gol, era el 1-0 en los primeros diez minutos del encuentro.

Además del bajón luego de recibir el primer tanto, todo se complicaría aún más para los de Barrio Jardín. Porque a los 25’ el local hizo el 2-0 luego de un contragolpe que terminó en pies de Ribeiro. El encuentro se se ponía demasiado cuesta arriba para Talleres y era el mejor pasaje de juego para Flamengo.

Igualmente a las 45’ los de Caixinha lo encontraron a Girotti, quien la aguantó y tiró un gran taco para que Fertoli llegara de atrás y pudiera descontar para el Albiazul (era el primer tiro al arco en el partido del Albiazul).

Ya en el segundo tiempo, el Matador fue a proponer un juego bastante físico y eso trajo su ventaja, porque el local empezó a mostrar desorden en sus retroceso. Pero por más que Flamengo no estaba jugando bien, a los 59’ Ribeiro volvió a aparecer para ampliar la diferencia a un 3-1. Luego de ese gol, el “Rojinegro” encontró más comodidad en su juego, jugaba con más tranquilidad y dejó de sufrir en el fondo. Ya sobre el final Talleres sufrió el cansancio, bajó la intensidad y simplemente esperaba que el encuentro terminara. Pero algo para destacar, es que el equipo de Barrio Jardín le jugó de igual a igual a Flamengo y dió una buena imagen.