Capilla Tegua: La Salamanca que tenía aterrados a todos los lugareños

Capilla Tegua: La Salamanca que tenía aterrados a todos los lugareños

Si tenemos en cuenta que la Capilla Tegua, ubicada en las sierras chicas, entre las localidades de Elena y Alcira Gigena, data del año 1696 y remodelada en 1748; con el correr de los años muchas historias se han tejido a su alrededor, pero la más cautivante es la de la salamanca en sus inmediaciones.

Antiguos habitantes de la zona de la Capilla cuentan que antiguamente los lugareños tenían miedo de cruzar la zona de las sierras chicas por el camino que unía la histórica Capilla con el camino de las Postas que servía de nexo entre el paraje que hoy es la localidad de Elena y lo que en la actualidad es la Ciudad de General Deheza por aquel entonces el paraje se llamaba “Español Muerto” y después “La Agrícola” ; ya que en las inmediaciones del lugar había una misteriosa cueva que los hombres y mujeres de la sierra daban en llamar la salamanca.

Si ubicamos geográficamente el lugar podemos decir que se trataría del camino que actualmente pasa por una propiedad privada, el camino es muy fino y si lo transitamos en auto dañaríamos su pintura con las ramas de los árboles autóctonos , pero los ciclistas,  motociclistas y gauchos a caballo lo transitan . Ese camino que se inicia en la tranquera tras el cartel que reza “Propiedad Privada”, pasa por el lecho de un límpido arroyo serrano y  termina efectivamente en el camino interurbano que viniendo de Río de Los Sauces pasa por Elena, Boca Del Sauce   y Puente Los Molles para terminar en General Deheza, denominación actual de la vieja posta “Español Muerto”.

La temible cueva estaba cerca de la capilla en las primeras lomas de la sierra apenas se pasa el arroyo, realizamos algunas caminatas por el lugar pero nunca vimos la cueva; tal vez encontrarla sea una empresa que demande largas horas de investigación, o quizás sea tan misteriosa que es una suerte no encontrarla.

Los lugareños decían que en la antigüedad cada animal, vaca, oveja o Cabra que se acercaba al sitio desaparecía para siempre y sus dueños sólo la buscaban hasta las inmediaciones no atreviéndose a acercarse a la salamanca por temor a ser devorados por la reina de las tinieblas.

El monte hoy es espeso y la tarea de encontrar el sitio no sería fácil, pero más de un ciclista o motoquero en sus travesías entra en el monte unos instantes para sentir la adrenalina de descubrir un viaje a lo inesperado.

Graciela, una Cabrerense nativa de Elena recuerda haber transitado junto a sus abuelos varias veces en un sulki  tirado por caballos el camino que antiguamente era más ancho; pero nunca vio nada extraño a su paso. Otros descendientes de lugareños si dicen haber escuchado varias veces la historia de la cueva y coinciden en una palabra propia de nuestro folklore, “La salamanca”

Según la tradición la Salamanca es un espacio destinado a la enseñanza y al intercambio de conocimientos ubicado en una cueva o en el monte, allí los jóvenes  aprende el arte que le interesa se dice que en esas cuevas se aprendía a domar, bailar, tocar la guitarra, curar, maleficiar y muchas otras artes , pero lo más extraño es que quien imparte las lecciones es el mismísimo  Supay (el demonio).

Otra de las historias de la cueva en la sierra cerca de la Capilla Tegua habla de los aborígenes del lugar pero seguramente será para otra historia.

Seguramente la cueva del diablo sea sólo un mito,…  pero usted no escuchó un ruido extraño al pasar en su bicicleta Venzo por el lugar.

 

La Salamanca en el interior cordobés .