Originalidad cordobesa: la casa giratoria

Originalidad cordobesa: la casa giratoria

La casa giratoria de Córdoba

Tras su llegada al país, Abdón Sahade, inmigrante llegado de Siria, formó su familia y prosperó. Como agradecimiento, decidió dejarle algo muy valioso y único a su ciudad. Esta vivienda, que fue trasladada a un museo hace 20 años, contiene un increíble mecanismo que le permite seguir teniendo luz, agua y gas aunque esté en movimiento.

 

Construida sobre ruedas de ferrocarril, le permite a quienes están dentro continuar con su vida normal mientras da vueltas y vueltas buscando, al igual que los girasoles, un poco de sol. Muchos años después de su creación, su edificación estuvo a punto de ser demolida, pero el reclamo del pueblo, que cuestionó la medida, fue más fuerte y se consiguió que sea trasladada. Así fue como aquel abril de 2004 el barrio Nueva Córdoba se partió al medio para que una casa comience un recorrido entre avenidas y autos hasta llegar al nuevo destino.

Abdón Sahade llegó desde Siria y se instaló en Córdoba. Allí se casó, tuvo cinco hijos y empezó a construir su propio camino en el rubro textil. Su éxito era tal que estaba muy agradecido por esta tierra que le permitió progresar. Es por eso que un día una brillante idea lo envolvió. Si bien hasta el momento no está claro cuál fue el puntapié principal, se logró saber que a Sahade le encantaba la arquitectura, aunque nunca había estudiado, deseaba que entre el sol todo el día en su casa y quería devolverle a ese lugar un poco de lo que un día le brindó. Fue de esa manera como decidió obsequiarle para su posteridad la casa giratoria.

Esta vivienda comenzó a construirse en 1947 y dio sus primeros giros en 1951. “Estaba en esa zona de barrancas y quería dejarla como agradecimiento a lo bien que le había ido en Córdoba, pero que no sea algo simbólico o representativo, sino que tenga un atractivo turístico, la primera casa que gira en el mundo”, contó Diego Marti, director del Museo de la Industria en diálogo con TN.

El traslado

Varios años más tarde, más precisamente en 2004, llegó una orden del Municipio para demoler la casa. De acuerdo a lo que se pudo saber, la familia quería vender la vivienda para la construcción de una torre y sostenía que su principal función, la de girar para que le dé el sol, ya no se cumplía por todos los edificios linderos.Pero el reclamo de la gente ante una situación tan particular obligó a los responsables a pegar el volantazo y de esa manera se frenó la demolición. Tras ello, lo que sí se ordenó fue que sea trasladada de la esquina de San Lorenzo y Paraná al Museo de la Industria en abril de 2004.

Su minucioso sistema fue encastrado, acomodado y parte de la casa fue nuevamente ubicada. De esta manera, en 2008 se puso en funcionamiento una vez más, pero en esta oportunidad desde adentro del museo. La primera casa giratoria del mundo. (Foto: gentileza Diego Marti)

La casa se puede visitar en el Museo de la Industria de martes a viernes de 8 a 14 y los fines de semana y feriados de 9 a 19. La entrada es libre y gratuita.