
Se reactivó el proyecto “Entrenando Corazones”
En el año 2001, comenzó en la ciudad de San Francisco el proyecto que se denomina “Entrenando Corazones”, el cual se trata de clases de natacón para niños que asisten a guarderías y hasta el 2019 se desarrolló sin interrupciones. Luego con la pandemia debió suspenderse y recientemente tras dos años sin actividad, se retomaron las clases de natación a las que asisten aproximadamente cien niños, con edades que van desde los 2 hasta los 5 años.
Las guarderías que participan del programa son siete: Manuel Belgrano, La Milka, Arturo Taglioretti, Paula A. de Sarmiento, Casa del Niño, Eva Perón y Maestro Aguirre
Al respecto, la profesora Fernanda Navarro, quien junto a su colega Silvana Boaretto están a cargo del Proyecto, indicó: “Las clases se llevan a cabo en el Sport Automóvil Club los días martes, jueves y viernes. Los niños son trasladados desde su guardería hasta el club en los colectivos de la municipalidad de San Francisco y, una vez que termina la clase, los llevan otra vez a su guardería donde continúan con sus otras actividades”.
Navarro agregó que “este proyecto necesita para su desarrollo del esfuerzo de muchas personas: directoras, docentes, auxiliares, profesoras de Educación Física de las guarderías, personal del trasporte de colectivos de la municipalidad y el apoyo del Sport Automóvil Club que cede sus instalaciones y elementos de trabajo de manera desinteresada desde hace muchos años”.
En referencia a algunos de los objetivos que se esperan alcanzar con la implementación de este Proyecto, la docente señaló: “Algunos de los fines de este programa son conocer y explorar el medio acuático, perdiendo el miedo y adaptándose al mismo; lograr una mejoría funcional y articular para favorecer la coordinación general; desarrollar las diferentes habilidades motrices por medio del juego; aprender y disfrutar juegos en el agua; favorecer el desarrollo de la autonomía y autoconfianza del niño; mejorar las relaciones afectivas y de comunicación docente – alumno; entre otros”.
Sobre lo que se espera con estas clases, Fernanda comentó: “A través de este proyecto se espera que el niño, frente a una situación de riesgo, aprenda a defenderse y tenga un nivel de tranquilidad adecuado que le permita flotar de espaldas y mantener su independencia respiratoria, como así también desarrollar habilidad para desplazarse por debajo del agua y en superficie moviendo sus piernas y brazos, pudiendo al mismo tiempo organizar su respiración”.
“Otro objetivo es que pueda iniciarse en la práctica de algunos de los estilos de nado. Siempre se respeta las posibilidades, necesidades e intereses de los mismos y los logros son individuales”, finalizó.