Talle unico: la pesadilla de muchos

Talle unico: la pesadilla de muchos

Por Sol Pérez Gaudio

Especial para CódigoCba

Comprar ropa: una actividad tan simple que  puede convertirse en una pesadilla al escuchar la frase: " solo tenemos talle único".
 

 En Argentina en noviembre de 2019, se sancionó la Ley Nacional de talles. Esta ley, establece la creación de un registro único y estandarizado de medidas en todo el país. De esta manera un talle "M" tendría las mismas medidas en todos los locales de ropa, algo que no sucedía hasta el momento.  Sin embargo, esta ley aún no fue implementada en la mayoría de los negocios.

El talle único, invisibiliza la diversidad de cuerpos existentes. Basado en un modelo hegemónico reproducido y alimentado por los medios de comunicación y la industria de la moda, deja fuera a quienes son "demasiados grandes" o " demasiados pequeños" para ellos. Esto explica la necesidad de una ley que sea regulada, implementada y controlada en todo el país. 

La imposibilidad de encontrar ropa significa una discriminación constante para aquellas personas que se salen de las medidas "esperadas" y perpetúan una construcción del cuerpo "ideal" alejado de la realidad. 

Si bien es una problemática que afecta tanto  a aquellos talles más pequeños que el estándar como a los talles más grandes, es también un factor que suma y alimenta a la conocida "Gordofobia".  Este término se implementó para caracterizar el rechazo y la discriminación hacia los cuerpos gordos.

Si bien hay quienes consideran que la militancia por la ley de talles y por la aceptación a la diversidad de cuerpos es una forma de avalar la obesidad, lo cierto es que la constante exclusión y discriminación hacia los cuerpos no hegemónicos son factores que suman al padecimiento de desórdenes alimenticios, sobre todo en jóvenes y adolescentes.Esta ley lejos de fomentar enfermedades, busca incluir y evitar que la compra de indumentaria sea excluyente y discriminatoria.

El Sistema Único Normalizado de Identificación de Talles de Indumentaria (SUNITI), propuesto por esta ley abarca desde la fabricación, confección hasta la comercialización e importación de indumentaria destinada a la población desde los 12 años de edad. 

Desde su sanción se dispuso de 1 año para su implementación y regulación, sin embargo luego de 7 meses todavía sigue siendo un deseo colectivo  sin resultados positivos.