Acuerdo financiero con EE.UU.: Cómo funciona el swap que fortalece las reservas argentinas

Tras el anuncio de un paquete de ayuda financiera de Estados Unidos a Argentina, la palabra “swap” se convirtió en el término clave para entender la magnitud del respaldo internacional. Se trata de una de las herramientas más potentes de los bancos centrales para garantizar estabilidad en momentos de crisis y su implementación es una señal de fuerte confianza política y económica.

Qué es un swap y cómo funciona

En términos sencillos, un swap (del inglés “intercambiar”) es un acuerdo entre dos bancos centrales para intercambiar sus monedas por un tiempo determinado. No se trata de un préstamo tradicional ni de un nuevo endeudamiento, sino de un canje de divisas que actúa como un seguro de liquidez.

En la práctica, el swap de US$20.000 millones acordado entre el Tesoro de Estados Unidos y el Banco Central de la República Argentina (BCRA) se desarrolla en varios pasos:

1. El intercambio: El BCRA entrega pesos argentinos al Tesoro de EE.UU. y recibe a cambio dólares por el equivalente a 20.000 millones de dólares.

2. Fortalecimiento de reservas: Los dólares ingresan al Banco Central, aumentando sus reservas internacionales. Aunque no son de libre disponibilidad como los de un préstamo, funcionan como un respaldo poderoso ante la volatilidad.

3. Uso para estabilizar: Los fondos pueden activarse para intervenir en el mercado cambiario y frenar corridas, o para facilitar pagos de comercio exterior. La sola existencia del swap funciona como herramienta disuasoria para los mercados.

4. Devolución: Al finalizar el plazo acordado, la operación se revierte: el BCRA devuelve los dólares (más una tasa de interés si fueron utilizados) y recupera sus pesos.

Beneficios principales para Argentina

El acuerdo ofrece ventajas estratégicas que fortalecen la política económica del país:

• Incremento de reservas: Engrosa de manera temporal el poder de fuego del BCRA, aumentando su capacidad para enfrentar volatilidad.

• Señal de confianza internacional: Que la principal potencia económica del mundo respalde de esta manera al plan económico del gobierno de Javier Milei envía un mensaje positivo a los mercados y puede calmar expectativas de devaluación.

• Herramienta de estabilización: Permite cubrir faltantes de divisas en momentos de alta demanda y evitar que problemas de liquidez se transformen en crisis de solvencia.

• Costo menor: La tasa de interés de un swap suele ser inferior a la de un préstamo internacional convencional.

Argentina ya cuenta con experiencia en el uso de este tipo de instrumentos, principalmente a través del swap con China, que ha sido activado en varias ocasiones para reforzar las reservas del BCRA. Sin embargo, el acuerdo con Estados Unidos representa un salto cualitativo en el respaldo internacional, consolidando la posición financiera del país ante escenarios de incertidumbre.